EP#166: Mujeres 8y9M Primera Parte - Silvia Escudero
Entrevista Silvia Escudero. Abogada, Terapeuta Familiar y Mediadora. ¿Que pasó este 8 y 9 de Marzo de 2020? Las mujeres toman el control de Azul Chiclamino.
Hoy tocaba hablar sobre mujeres, pero evidentemente no me toca a mí hablar sobre mujeres, de cierta forma lo que toca es, que las mujeres tomen el control de Azul Chiclamino y pueden platicar sobre las mujeres, así es que hice una pequeña dinámica: Invité a “alguien” a través de Twitter a tomar el control de los micrófonos de Azul Chiclamino y la respuesta fue magnífica, hoy nos toca hablar con Silvia Escudero, abogada, terapeuta familiar y mediadora.
Transcript
Rodrigo Llop – RLL: Hola, Silvia.
Silvia Escudero – SE: ¡Hola!
RLL: Queremos platicar sobre qué es lo que sucedió este fin de semana y este lunes, con respecto a las mujeres, porque muchas veces nos quedamos pensando: ¿Qué fue esto que nunca había sucedido en México? ¿Qué pasó en México?
SE: Yo creo que no pasó en México sólo este fin de semana, creo que llevamos mucho tiempo y nos han pasado muchas cosas, durante muchos siglos y queremos que esto cambie.
RLL: ¿Por qué nunca habíamos visto un movimiento de esta magnitud en México?
SE: Creo que las cifras de feminicidios, sin duda, tienen mucho que ver, pero queremos alzar la voz o es nuestra intención que nuestras acciones nos volteen a ver y nuestras omisiones, logren que seamos vistas, que nuestra voz pueda ser escuchada y puedan entender, ustedes los hombres, muchas cosas que nos pasan.
RLL: Todo esto viene de la diferencia que existe en muchos ámbitos, con respecto al hombre y la mujer. ¿Desde donde parten, exactamente, esas diferencias? Porque claro, es evidente donde somos distintos y cómo somos distintos, pero ¿en dónde se aterrizan entonces estas diferencias?
SE: Creo que aquí cabe bien un concepto, que está bastante difundido en tiempos modernos, que es el patriarcado. Es entender que venimos de una sociedad, de una cultura, en donde se nos han establecido ciertos roles y se nos ha exigido que hombres y mujeres cumplan estos roles y eso hace que no lo veamos, que estén muy normalizados y que esto establezca diferencias inequitativas entre hombres y mujeres y eso es parte de lo que qué queremos cambiar.
RLL: Roles completamente fuera de lo que es la realidad de hoy en día.
SE: Sí y queremos que cada día estén más fuera; a final de cuenta pensemos en una familia, donde en una familia, porque sólo la mujer tiene que lavar y planchar, porque sólo el hombre tiene que ser el proveedor, porque el hombre no puede llorar y no puede expresar sus emociones y sentimientos, porque la mujer es la única que tuviera que cuidar, porque las hermanas tienen que hacerle de desayunar a los hermanos, porque es la mamá la que tiene que darle la medicina al niño. Son diferencias que se han establecido y que son muy comunes en los hogares mexicanos y bueno por supuesto, en otros países, no.
RLL: ¿Es un problema completamente social?
SE: Es un problema social, que genera desigualdades, y qué es parte de lo que queremos hablar.
RLL: ¿Por qué no han habido foros hasta este momento, para poder hablar sobre ello, para poder encontrar o negociar esas diferencias?
SE: Si se han hablado, creo que ha habido un avance en las últimas décadas, pero los cambios siguen sin ser suficientes. A principios del siglo pasado la mujer no tenía derecho a voto, ¿por qué? Porque se pensaba, se consideraba, que no era capaz de elegir una representación popular, y hoy por hoy nuestro voto sí vale igual que el voto del hombre. Entonces, sí han habido cambios, pero no son suficientes.
Siguen habiendo mujeres que por trabajo igual al hombre ganan menos, sigue habiendo la famosa doble jornada, que ahora ya las mujeres tenemos la posibilidad, la oportunidad, de tener un trabajo fuera de casa, pero existe todavía la creencia de que tienen que llegar a seguir cumpliendo con los roles que han estado establecidos toda la vida y entonces la mujer sale a trabajar, o salimos a trabajar, y regresamos y tenemos que “atender”, y por favor déjame marcar unas comillas bien grande a la familia, tenemos que encargarnos de que haya comida, de los uniformes de los hijos, etcétera. Funciones que lamentablemente me han tocado ver, vivir, que el hombre en una posición generosa se ofrece a ayudar, cuando en realidad debieran de ser labores compartidas, no es que ayude de una manera generosa, a cuidar a los niños o a cambiar un pañal o a hacer la comida o a lavar los trastes. Eso siguen siendo roles que se siguen pesando que son exclusivos de las mujeres y no. La casa es de los dos.
RLL: Entonces a nivel social, se requiere un cambio evidente en lo que son los profundos roles entre el hombre y la mujer. En diferentes ámbitos. En la casa, en el trabajo, en la sociedad, en la política incluso. Hace falta más mujeres que tomen el control de la política de este y de todos los países.
SE: Si, lo que se ha buscado en términos políticos, es la paridad y las cuotas de género. Ya hay muchas leyes que lo contemplan, hay mucha gente, principalmente los hombres, que dicen: “oye, pero ¿por qué habría necesariamente, de haber el mismo número de diputadas, que, de diputados, o de ministros de la suprema corte? En donde se está, me ha tocado escucharlo muchos foros, en donde se cuestiona que se está privilegiado el mismo número de hombres y de mujeres y no la capacidad o la calidad profesional de esos funcionarios públicos, que tendrían que ocupar el lugar y me parece que eso es una transición que tenemos que vivir.
Sin duda buscamos que las personas más calificadas, sean los que ocupen el puesto público, pero es importante que se termine esta brecha que hay, y por eso hoy por hoy las leyes exigen cuotas de género. Se busca que se encuentren a estas mujeres, hoy por hoy, que están capacitadas y tienen las cualidades profesionales para poder ocupar estos puestos públicos. Esto sí lo estamos viendo, pero todavía hay mucho, mucho por recorrer.
RLL: Estamos muy lejos todavía.
SE: Estamos muy lejos y me gustaría también tocar el tema profesional. Si pudiéramos ver las cifras de cuántas mujeres ocupan puestos de alto nivel en las empresas y veremos que todavía estamos muy lejanas a que haya una igualdad, en el número de personas del género femenino y de género masculino que ocupan puestos importantes, y esto no es porque las mujeres no tengamos capacidad, es porque se siguen buscando a hombres que ocupen estos puestos y porque se sigue pues privilegiando al hombre. Los hombres viven en el privilegio y la mayoría de las veces no lo ven.
RLL: Para nosotros los hombres está normalizado, para nosotros, ese tipo de beneficios que de cierta forma tenemos o disfrutamos y que son normales porque pues siempre han estado ahí.
SE: El tema de los privilegios o el privilegio en el que han vivido los hombres, desde el ser hombres, no lo ven porque sin duda es algo que no quieren perder y no se trata que los hombres dejen de poder ocupar un puesto público de importancia, o no se trata de que ya no sean el director de la empresa, se trata de que también sea vista la capacidad, que las mujeres podemos tener para poder ocupar los cargos públicos, que puedan ver que para llegar a estos lugares a las mujeres nos cuesta mucho más trabajo, porque tenemos en la familia, en la escuela, en la sociedad, en la empresa, dificultades que los hombres no ven que están puestas allí y que el camino tenemos que recorrer es mucho más largo mucho más difícil, mucho más cansado quizás.
RLL: Ahora, estamos hablando entonces por ejemplo de romper con ciertos roles en cuanto a la familia y la sociedad. Estamos hablando también de que es necesario una igualdad de género, en puestos de gobierno, en puesto de empresas y hay un punto en el que las mujeres se ven restadas de cierta forma, por decirlo de alguna forma, en el ámbito de, por ejemplo: el embarazo. Eso es un tema que resta a nivel decisiones de empresas, o de gobierno también, porque pierden los espacios también por el tema de ser madre, muy distinto al tema de ser padre.
SE: Bueno yo aquí creo que de alguna manera es avanzar o falta mucho por recorrer, ya las leyes también están puestas para que no haya discriminación en cuestión de género y por supuesto es gravísimo que, por un embarazo, una mujer que se sienta discriminada por el embarazo puede ser gravísimo. Aquí el punto No nada más es eso, qué tiene que pasar en la familia para que esto sea posible, porque si cierto hoy el patrón ya no puede correr a una mujer embarazada, pero qué pasa cuando llega a su casa y tiene que hacerse cargo de esa doble jornada, de la que yo te hablaba. Aquí tiene que ver el hombre... los hombres tienen que replantear el rol familiar, cada vez más mucho camino que recorrer, tienen que darse cuenta que la familia es de ambos y ambos eligen formar esta familia y que los hijos son de ambos.
También en materia familiar ha habido cambios importantes, en donde visto como derecho de los hijos, ya está viendo temas de licencias de paternidad, para el cuidado de los hijos. En caso de divorcio es importante que ambos padres se hagan cargo de la atención y no nada más de la proveeduría de los hijos. Pero bueno, si hay un camino recorrido, mucho muchísimo más por recorrer, pero yo destacaría la importancia de que los hombres, y retomando el tema de que pasó en estos días o de que queremos que pase, es que los hombres se den cuenta de lo que vivimos las mujeres.
Porque es fácil que no que no se den cuenta y que no empaticen con estas peticiones; y esto genera violencia que también es parte... es un gran grito esta marcha y el paro de ayer, quiere mostrar. La violencia, si está reflejada en la cantidad de feminicidios qué es escandalosa. Somos el país con mayor número de feminicidios en el mundo. La violencia está por ejemplo en el noviazgo, esto a lo mejor se habla poco. También ha habido casos que han parado en la comisión de un feminicidio, en donde los hombres se sienten con el derecho de controlar la forma de vestir... Que buscan controlar en qué momento la mujer sale de su casa, a quien ve con quién se comunica, cómo se viste. Todo esto, es parte de la violencia de la mujer vive, de los grandes temas es qué los hombres nunca han vivido la inseguridad o el miedo que se siente de salir a la calle.
RLL: Eso lo quería tocar, el tema de seguridad. Es muy distinta la inseguridad para un hombre, que, para una mujer. Claro salir de noche, bajo ciertas circunstancias para un hombre, es peligroso. Pero en esas mismas circunstancias, es más peligroso para una mujer.
SE: Es mucho más peligroso para una mujer, han circulado a raíz de la marcha y del paro muchas mini encuestas entre mujeres, en donde el porcentaje de abusos que hemos vivido como mujeres, es escandaloso. ¿Cuántas veces te han visto con ojos que te desnudan por la calle? ¿Cuántas veces en el transporte público estás expuesta a que te toquen? ¿Cuántas veces te han callado, porque eres mujer, porque no tienes derecho a hablar fuerte? El cómo te cuestionan por qué sales a determinadas horas, el cómo te ven culpable, por haberte puesto una falda corta... no nada más es el miedo, sino la impotencia que se siente de saber que la sociedad te culpabiliza y te violenta por todos lados. No nada más es el miedo, no más nada más es la inseguridad que vivimos todos, sino además de todo nos echan la culpa, porque nosotras cometimos conductas que eran “impropias”, porque somos mujeres.
RLL: La provocación, es culpa de la mujer...
SE: Eso es lo que hay que romper, nosotros no provocamos, nosotros tenemos derechos a salir vestidas como elijamos, así como ustedes tienen ese derecho. Porque nosotros tenemos derecho a caminar por una calle, en donde si vemos a un par, no necesariamente un par, o un grupo, sino a un ser humano del sexo masculino, al final de la calle, no tener el miedo de a ver qué hace... porque me puede chiflar, porque me puede “piropear”, y vuelvo a poner entre comillas la palabra, porque me puede tocarme, puede hacer muchas más cosas que son por supuesto, mucho más violentas. Pero eso no significa que desde el temor que yo tengo de esa posibilidad, porque la mayoría de las mujeres la hemos vivido la gran mayoría, y eso es lo que los hombres no logran ver.
RLL: Claro, uno de los temas es como mujer, tener que salir con alguien, no poder salir sola, por temas de seguridad y después el otro tema es no poder salir sola, porque... pues es ciertamente muy distinto para una mujer, que para un hombre ser mujeriega, que hombreriego.
SE: Bueno, eso es parte del romper con el patriarcado del que platicábamos hace ratito, son las etiquetas que tenemos puestas, es si una mujer sale con muchos hombres, entonces es una zorra, es una puta, es una... qué sé yo, sabemos todos los...
RLL: ...Resta, y sin embargo para un hombre, suma...
SE: Claro, ¿por qué? porque el que un hombre tenga muchas mujeres, lo coloca en una mejor posición social. Entre sus pares, eso lo agranda eso le da más valía. Y esa es parte de las diferencias que hay que romper, eso por, no tendría por qué, no tendríamos como mujeres porque valer menos por elegir, de qué manera queremos ejercer nuestra sexualidad.
Y eso nos pone en una posición vulnerable, no, porque eso a ojos de los hombres nos descalifica, y cómo estamos descalificadas, nos objetivita. Nos hace un objeto del cual los hombres pueden disponer, y eso tiene que cambiar... tiene que cambiar.
RLL: Todo eso que, creo que fue, de cierta forma creo que fue relativamente claro para los hombres, lo que vivimos este domingo y pues hoy lunes, pero no es suficiente. Poder reeducar al hombre, es una labor titánica.
SE: Es una labor titánica y creo que responsabilidad de todas las esferas, primero es importante empezar por la familia. Por la familia que no es un trabajo fácil, en principio yo te diría que, como madres, tenemos que saber cómo educamos tanto a nuestras hijas, como nuestros hijos. Me parece que la educación es fundamental, de manera tal que podemos enseñar a nuestros hijos a que nos valoren, a que nos reconozcan, a poderles mostrar esta igualdad desde casa. Aquí creo que es una labor titánica, porque lamentablemente, en el país vivimos una violencia intrafamiliar terrible, en donde esto está tan arraigado, que el hombre que se vive como en épocas de los romanos, imagínate hasta dónde nos vamos, que son dueños de los hijos y de las mujeres. Afortunadamente ya no hay esclavitud, pero hay muchos que se siguen asumiendo desde este lugar del patriarcado, como dueños de las mujeres y de los hijos. Entonces si es importante que otras esferas de gobierno, las esferas publicas participen de la deconstrucción de toda esta estructura, porque las mujeres si es importante, que puedan sentirse seguras en el país y seguras en su casa.
Y bueno hablando de delitos, es escandaloso el que las mujeres violentadas, el principal lugar donde lo son, es en su casa o en ámbitos cercanos; por esto que te digo el nombre se asume con derecho a poder disponer de la mujer. Entonces si es un trabajo muy complejo, pero hay que empezarlo, hay que empezarlo hoy. No esperar que otro lo haga, si no justo... esta marcha, este paro, tiene que ver con el hacernos escuchar, con acciones y con omisiones y también asumir nuestra responsabilidad de que esto no pare hasta que la historia cambie.
RLL: Las mujeres en la escuela. Hace falta llevar a más mujeres a la escuela. Es un problema de las escuelas por sí, o es un problema de las mujeres, o es un problema justo eso, también vienen el patriarcado que se le da más oportunidades de estudiar los hombres, ¿será?
SE: Sí, sí por supuesto, en donde socialmente se cree que, si hay un salario para mandar a la escuela a un hijo, se va a preferir al hijo y no a la hija, por ejemplo. En donde se sigue pensando que el hombre deberá de tener más oportunidades, para que pueda seguir siendo el proveedor, y entonces a la mujer se le limita en todas estas posibilidades. Y también importante el recalcar el trato igual a alumnas y alumnos, porque es parte de la igualdad que si buscamos. La igualdad de derechos, en donde las oportunidades tienen que ser iguales. Y es importante también el saber, que cada vez más hogares mexicanos, son sostenidos económicamente por mujeres, mujeres que nuevamente que cumplen con el doble rol, la doble jornada. El ser proveedoras, porque dentro de este patriarcado y de estos roles malos entendidos, una relación de pareja termina es mucho más común que el hombre se vaya y forma otra familia, que quizás también vuelva a abandonar, y la madre se haga cargo de la manutención y del cuidado de los hijos. Entonces pues, me parece que está de entradas podría ser una buena razón para defender la igualdad de oportunidades de hombres y mujeres.
RLL: Por último. Para cerrar, abro la Real Academia de la Lengua Española, el diccionario, y leo feminicidio: asesinato de una mujer a manos de un hombre por machismo y misoginia. Me sorprende que hoy en día sigamos, incluso en los círculos altos, de las empresas, de la familia, de la sociedad, del gobierno... sobre todo... sigamos hablando de la palabra hombricidio, porque no existe un hombricidio, si sí existe el feminicidio, y lo que decías hace rato, porque clasificarlo, porque diferenciarlo. ¿Cuál es la importancia a nivel legal, o a nivel derecho, de este tipo de cuestiones?
SE: Creo que es una pregunta que tú te haces y que se hace mucha gente, porque hablar de feminicidio cuando el mayor número de hombres mueren de una manera violenta; y sí es cierto, nada más que a los hombres, lo matan otros hombres, en esta estadística. ¿Son muertes violentas? Si. ¿Se debe combatir? Por supuesto que sí. Es parte del problema que vivimos en este país, de manera importante, pero no los matan por ser hombres. Aquí a las mujeres, el feminicidio es un tipo penal que está establecido para proteger el valor jurídico de la vida de las mujeres, que están que están siendo violentadas por serlo, porque se considera un objeto del cual el feminicida puede disponer, y por qué es una necesidad social que no podemos perder de vista, en donde hasta los cadáveres los destrozan, porque es un objeto que se puede tirar a la basura, porque no tiene valor y es importante que se combata, y que se castigue. Las mujeres están siendo matadas por ser mujeres, y hay toda una explicación, por supuesto, sociológica, antropológica, jurídica, de la necesidad del tipo penal feminicidio. Aquí sin duda es la punta del iceberg, pero me parece que vale la pena, revisar en todos los espacios y todos los momentos que son lamentablemente cotidianos y a todos los niveles de violencia que vive la mujer y déjame te comento por ejemplo el tema de los micromachismos. Ahorita que abriste el diccionario, hablabas del machismo, y a lo mejor sí hay un foco en esa palabra, pero lo micromachismos, tienen que ver tiene que ver con “calladita te vez más bonita”, tiene que ver con “cámbiate de blusa”, porque ensenas mucho. Tiene que ver a la hora de manejar “hay seguro es vieja”, todos esos comentarios que están normalizados, eso también es violencia. De verdad, creo que, en redes sociales, ya circulan algunos videos, en donde hombres se visten de mujeres y entran al transporte público, de verdad que son situaciones que realmente generan impotencia, y son todos los días; todos los días, en todas las estaciones del metro, en todos los camiones, la violencia está muy, muy, muy puesta en nuestra sociedad y hay que combatirla.
RLL: ¿Crees que se haya logrado algo? Durante estos días de hablar, de comentarlo, de por supuesto de ver la cantidad de mujeres que salieron a marchar.
SE: Sí, sin duda se han logrado muchas cosas. ¿Será suficiente? La respuesta creo que es, no. Definitivamente, el trabajo tiene que continuar, el trabajo de todas tiene que seguir, de todas y de todos. Pero yo creo que, a partir de este ejercicio, incluso muchas mujeres, se dieron cuenta de que sufren violencia o han sufrido violencia. Que, en este patriarcado, en esta sociedad, en esta cultura en la que vivimos está tan normalizado, que ni ellas mismas se dieron cuenta. Entonces la suma de voces, va a permitir que sigamos caminando.
RLL: Muchas gracias Silvia. Vamos a seguir platicando sobre este tema, porque es importante que lo discutamos. Es importante que tomemos una reflexión, con respecto a lo que está sucediendo hoy en día en nuestro país en Latinoamérica, en toda América y por supuesto en el mundo. Espera la segunda parte de ese episodio. Gracias.